Una pregunta muy común que muchos pacientes deportistas hacen en la consulta es ¿Cuándo hay que estirar, antes o después del ejercicio?
La respuesta no es sencilla porque no existe unanimidad entre profesionales. Os dejo mi opinión al respecto.
En primer lugar, no debemos confundir estirar con calentar. El calentamiento es un hábito que todos los que realizan cualquier tipo de actividad física deberíamos tener y consiste básicamente en activar el cuerpo para que esté preparado para la actividad. Esto quiere decir que aumentamos progresivamente la frecuencia cardíaca hasta una intensidad adecuada, favorecemos el aporte sanguíneo a los músculos y aumentamos la temperatura de los mismos, activar los mecanismos neurológicos de protección, etc. Pero este tema da para un post más adelante.
Por otro lado, estirar es una acción completamente diferente cuyo objetivo no es otro que mantener o mejorar la capacidad elástica de los músculos. Ambas acciones, estirar y calentar, tienen algo en común, y es que los objetivos finales son sacar el máximo a nuestro cuerpo y evitar las lesiones.
Cuando hablamos de estiramientos debemos saber que existen distintos tipos (esto también da para otro post, jeje). Normalmente la mayoría de las personas conoce y realiza estiramientos analíticos y estáticos. Esto quiere decir que se estiran músculos de forma aislada y no global y que el estiramiento se hace sin movimientos, sólo manteniendo la posición. Si nos imaginamos sujetando nuestro tobillo por detrás de nosotros con la rodilla doblada, estamos pensando en un estiramiento analítico y estático del cuádriceps y es el tipo de estiramiento más sencillo de realizar para cualquiera.
Pues bien, el estiramiento puede realizarse en cualquier momento del día, independientemente de si se va a realizar o no alguna actividad deportiva. De hecho con frecuencia mando a mis pacientes estiramientos para realizar en casa, el trabajo... Sin embargo, cuando hablamos de práctica deportiva, el mejor momento, en mi opinión, para realizar los estiramientos es al finalizar la misma. ¿Por qué?
- Es el momento en que los músculos tienen mayor temperatura y viscoelasticidad, lo que favorecerá el estiramiento
- Es más sencillo ponernos a estirar cuando estamos ya "metidos en faena" que sacar tiempo en otro momento sólo para estirar. Como que nos da pereza
- Es agradable terminar la actividad deportiva con la sensación del estiramiento
¿Se puede estirar antes del ejercicio? Es aquí donde aparece la controversia. En los últimos años he leído estudios de los que se deduce que el estiramiento antes de la actividad deportiva puede ser contraproducente porque puede incluso llegar a disminuir el rendimiento deportivo. Sin embargo esta opinión no es compartida por todos los profesionales.
Como conclusión, ante la duda, el mejor momento para estirar, en mi opinión, para los que realizáis cualquier actividad deportiva, es después de la ésta.
Como siempre, espero que os sea útil!!
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